sábado, 22 de noviembre de 2014

Nuestra privadísima oficina de la práctica privada de la abogacía tuvo a bien presentar ayer tres casos de capítulo 7 ante el Tribunal de Quiebra.  Lejos de señalarse los casos para verse consecutivamente, el mismo día, o con el mismo síndico, los señalamientos llegaron, acto seguido,  para 3 dias consecutivos diferentes, con dos síndicos diferentes.  Esto, sumado a las largas horas de espera a las que se someten todos los deudores y abogados de deudores para ver sus vistas de acreedores, encarece los procesos de quiebra, y aumenta los niveles de ansiedad.  Es un problema frustrante que no parece tener solución.  Pero a alquien hay que decirselo.